Hace más de cincuenta años las artes visuales y las disciplinas creativas suscribieron la teoría como parte integral de la obra de arte o del trabajo. La idea de desmaterialización tomó cuerpo en proyectos artísticos que privilegiaron las ideas, los procesos de investigación y el archivo antes que el resultado o la materialidad de la obra en sí.  El conceptualismo, tendencia artística caracterizada por la desmaterialización, estableció estrategias discursivas -así como políticas de resistencia- paralelas a las emprendidas por la arquitectura de papel, el cine estructuralista y la nueva ola, la intertextualidad, la novela ensayo, la música minimalista y la danza postmoderna, entre otras modalidades experimentales de lenguajes que además de cuestionar la mercantilización del arte promovieron un tipo de colaboración interdisciplinaria.  

Dentro de este paradigma epistemológico radical ha destacado el artista uruguayo radicado en Nueva York, Luis Camnitzer. A partir de la década de 1960, Camnitzer desarrolló una línea estética-política localizada dentro de los confines de la educación, entendida ésta como metodología anticolonial. Pero en los últimos años, Luis Camnitzer se ha dedicado a estudiar las potencialidades de resistencia en la inteligencia artificial (IA). 

La IA está produciendo una revolución que consiste en un rápido cambio cognitivo que fundamentalmente modifica los procesos de investigación y la lógica de producción de conocimiento. Paradójicamente, al reducir el tiempo de investigación y recolección de datos, la inteligencia artificial está transformando el llamado mal de archivo en una portentosa máquina ficcional que desdobla e hiperboliza las capacidades de las humanidades. La enorme velocidad que la IA ha adquirido en el procesamiento de información y su capacidad para relacionar y conectar disciplinas, cuerpos textuales y saberes hace de ella un recurso tecnológico que amplía exponencialmente las capacidades humanas. Quizás es por lo que la IA es considerada en las humanidades como un avance monstruoso, un moderno Prometeo, que amenaza con destruir las disciplinas del espíritu.  Luis Camnitzer conversará sobre esta herramienta que anuncia una segunda muerte del autor (después de Barthes y Borges) cuya resurrección queda a cargo un(a) lector(a) ex machina. 

Luis Camnitzer. Artista, crítico, educador y teórico uruguayo nacido en 1937. Ha desarrollado su práctica durante casi cinco décadas. En 1964 co-fundó el New York Graphic Workshop, junto con la argentina Liliana Porter y el venezolano José Guillermo Castillo. Su trabajo ha sido mostrado en importantes exposiciones e instituciones desde la década de 1960, y ha formado parte de numerosas bienales internacionales. Fue el asesor pedagógico para el programa de arte en la educación de la Colección Patricia Phelps de Cisneros de 2009 a 2013.

‍Gabriela Rangel (Venezuela, 1963). Curadora y escritora independiente. De 2004 a 2019 fue directora de artes visuales y curadora en Americas Society, Nueva York, y de 2019 a 2021 directora artística en el Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (Malba). Fue curadora asistente en el Museum of Fine Arts de Houston de 2001 a 2004. Tiene una Maestría en Artes por el Center for Curatorial Studies de Bard College, Nueva York.